Los micrófonos de ambiente, también conocidos como room-mics o micrófonos de sala son una de las herramientas más poderosas que tenemos para modificar el sonido de una batería. La cantidad de sonidos distintos que podemos obtener con la manipulación de los mismos es bastante importante y nos da en combinación con la manipulación de los micrófonos cercanos un abanico importante de posibilidades.
El uso de las técnicas acá explicadas depende de nuestro criterio y está claro que no se deben usar siempre o de usarse no necesariamente tienen que ser demasiado evidentes.
Los micrófonos de ambiente
La batería suele ser el instrumento para el que más micrófonos usamos, ya sea micrófonos para cada cuerpo, los overheads o aéreos y por lo general se graba además un micrófono, o dos si es una técnica estéreo de microfonía, para capturar el sonido ambiente de la sala.
Los room mics son muy importantes ya que nos ayudan a darle profundidad a la grabación de la batería y nos pueden servir como un elemento extra en la mezcla con el que podemos conseguir algunos efectos interesantes para salir un poco de lo tradicional.
Cuando la sala es de gran tamaño se puede usar estos micrófonos para dar una sensación de ambiencia o reverberación, que enriquece el sonido y le provee más realidad.
Exagerando la sala
Una de las maneras para exagerar el tamaño de la sala y por lo tanto la sensación de ambiencia o reverberación es a través del uso de la compresión. En este caso la compresión debe tener unos parámetros de ataque y release específicos.
En principio lo que queremos es atenuar o quitar lo más posible el ataque del instrumento y dejar el sonido del ambiente, es decir necesitamos que el ataque sea muy rápido, por otro lado como queremos exagerar el ambiente necesitamos que el compresor deje de actuar rápido para poder aumentar el decaimiento o reverberación.
Por otro lado necesitamos colocar el umbral del compresor muy bajo y provocar que prácticamente el sonido esté distorsionado. Por último lo que hacemos es sumar el sonido de este micrófono comprimido con el resto de la batería y por arte de magia obtenemos una batería gigantesca.
El primer ejemplo es de un micrófono de Room mono con una compresión con ataque muy rápido y release rápido, el compresor usado fue el CLA-1176. Notese como la sala aparece de repente y suena con mucho más espacio.
Destruir para construir
Otra forma de obtener un sonido interesante y diferente de los micrófonos de room es aplicar una distorsión para darle suciedad al sonido.
Si bien esto crea un efecto drástico, este puede ser lo que se necesita para dar un toque especial a alguna mezcla. Para que la distorsión suene cálida y más parecida a una analógica podemos usar un filtros pasa bajos inmediatamente después o en el plugin de distorsión.
En este ejemplo en particular se uso la distorsión de SansAmp y allí se aplico el filtrado de agudos mencionado. Para ajustar el nivel de suciedad se puede probar con la ganancia y con el drive de la distorsión que elijamos.
Sumando delays
Además de la distorsión se puede crear un efecto aún más imponente si usamos delays para complementar a la distorsión mezclados en una cantidad que va a depender del gusto de cada uno. En este caso el delay se colocó inmediatamente después de la distorsión y en serie, un caso especial de fx, por otro lado la mezcla se logró con el parámetro wet/dry.
Dejando los room mics solos para dar impacto a una sección
Una derivación de esta estrategia es ubicar una parte de la canción distinta y usar los room mics como los únicos micrófonos de batería. Para ello debemos automatizar los demás canales y silenciarlos durante esta parte, asegurandonos que la transición entre partes es adecuada.
Si queremos tener una variación de este truco podemos usar distorsión y delay luego de la compresión para ensuciar el sonido y hacerlo del tipo baja fidelidad. Sin duda esta forma de tratar la pista es extrema pero nos da un sonido muy interesante.
Conclusiones:
Los micrófonos de ambiente o room mics de una batería son lo que le dan vida y ambiencia/reverberación a la mezcla de la misma. Al ser una señal extra tenemos la posibilidad de procesarlo de manera de crear un sonido con mucho caracter.
Si bien las técnicas aquí presentadas no son para todos los micrófonos room de todas las canciones que pasen por nuestras manos para mezclar, nos dan varias posibilidades para nuestra paleta de colores a la hora de mezclar.
Como es costumbre les sugiero que prueben estas técnicas y experimenten con ellas para llegar a algo que les sirva en sus producciones y puedan adoptarlas.
[…] En realidad se suele emplear micrófonos de sala cuando la misma es de un tamaño grande y tiene un tratamiento acústico apropiado, ya que de lo contrario el sonido que aporta va a ser mas bien negativo; si la sala es de un tamaño importante podemos aumentar su sonido usando compresión. […]