El proceso de grabación vocal no tiene demasiados secretos en sí. Consiste en realidad en una suma de procedimientos que nos permiten tener voces de calidad como materia prima para trabajar en el resto del proceso de la producción vocal.
Aprenderás cómo grabar voces profesionales repasando los fundamentos de las producciones profesionales que son aplicables a las del homestudio: dile adiós a las voces frías, opacas y distorsionadas.
Empecemos por elegir el micrófono con el que vamos a grabar la voz.
Elección del micrófono
La mayoría de las personas que me hace preguntas acerca de cómo grabar voces profesionales se suele referir a características que son percibidas como positivas: ¿cómo obtener voces cálidas y claras? ¿cómo lograr que la voz se entienda? ¿cómo hacer que mis grabaciones vocales suenen profesionales?
Responder esas preguntas no es sencillo; pero empezar por una correcta elección de micrófono es vital para grabar voces profesionales.
Ya hablé con anterioridad sobre cómo elegir un micrófono, pero vale la pena repasar algunos de los conceptos necesarios para elegir un micrófono adecuado para grabar voces profesionales.
El micrófono es una suerte de intérprete entre la fuente y el resultado final. Cada micrófono tiene sus características asociadas y cada micrófono es distinto entre sí. Es más, es posible tener dos micrófonos del mismo modelo que suenen distintos entre sí.
A pesar del gran abanico de posibilidades a la hora de escoger un micrófono, lo más importante es considerar si dicho micrófono complementa la voz que queremos grabar.
Si vamos a grabar una voz brillante, es mejor usar un micrófono que sea algo opaco en las altas frecuencias, para no realzar más esa característica. Si tenemos una voz opaca, podemos usar un micrófono que realce las frecuencias agudas, para compensar lo que no tiene la voz.
No importa que tan caro o venerado sea el micrófono que vayamos a usar para grabar voces, si no resalta las características positivas de nuestro cantante, mucho no se puede hacer luego.
A grandes rasgos, existen tres familias de micrófonos: dinámicos, de condensador y de cinta. Cada una de estas familias de micrófonos tiene características particulares. Veamos algunas de ellas:
Micrófonos dinámicos
Son los micrófonos preferidos para el sonido en vivo. Funcionan mediante una bobina adherida a una membrana, que se mueve dentro de un imán y por ello generan la señal de audio; entre sus características principales tenemos:
- Sensibilidad: tienen valores relativamente bajos, que significa que captan menos detalles y necesitan de mayor ganancia en el preamplificador para tener un buen nivel de grabación. Hay que tener cuenta esto ya que en general se van a usar a distancias mucho menores al cantante por ejemplo 5 cm.
- Respuesta en frecuencia: en general tienen buena captación de las frecuencias que se le presentan, aunque poseen una caída en las frecuencias agudas y bajas, por lo que no van a captar tanto detalle de «aire» o brillo. Vienen muy bien en cantantes que tienen un sonido muy brillante o sibilante y en los que no se quiere exagerar esas características.
- Respuesta en transiente: es algo lenta, eso significa que les cuesta un poco captar detalles como consonantes duras y sonidos con muchas transientes. Pueden servir cuando el sonido del cantante es excesivamente «percusivo» o incontrolable.
- Robustez: suelen ser muy resistentes a los golpes, caídas y diferentes factores ambientales de riesgo; por lo que precisan muy poco mantenimiento o reemplazo.
- Patrón polar o direccional: en general presentan un patrón polar direccional cardioide. Esto beneficia las grabaciones de voces, ya que permite captar mucho el sonido directo de la voz, atenuando el sonido de las reflexiones de la sala que vienen detrás de la cápsula.
Este tipo de micrófono no necesita de alimentación externa o phantom power, lo que es ventajoso en algunas situaciones en las que el preamplificador no posea esta función.
Ejemplo de micrófonos dinámicos de la firma Shure, a la izquierda el modelo SM58 a la derecha el Beta 58A. Imagen tomada de: https://commons.wikimedia.org/wiki/File:SM58%26Beta58a.jpg
Micrófonos de condensador
Son tal vez los micrófonos que asociamos con la grabación de voces en estudio; funcionan con una membrana móvil enfrentada a una placa fija, ambas metalizadas, formando un condensador/capacitor. Entre sus características tenemos:
- Sensibilidad: tienen valores relativamente altos, por lo que captan muchos detalles de la fuente. En el caso de la voz: las respiraciones, sonidos de la boca, pasos en el piso, etc. Esto es bueno si la sala está tratada acústicamente y si el cantante tiene un buen manejo de su voz.
- Respuesta en frecuencia: en general tienen muy buena captación de las frecuencias que se le presentan, teniendo en muchos casos una respuesta bastante neutral; en ese sentido captan detalles de altas y bajas frecuencias. Esto viene muy bien para voces algo opacas o oscuras y cuando queremos resaltar todo el espectro frecuencial de la voz. Hay que prestar atención a este parámetro ya que existen modelos de esta familia que realzan ciertas zonas frecuenciales a propósito o por errores del diseño y puede ser excesivo.
- Respuesta en transiente: es muy rápida lo que significa que captan todos los detalles de las consonantes, sonidos percusivos y rápidos que se les presenta; a veces esto es bueno y otras veces nos puede jugar en contra.
- Robustez: suelen ser mucho menos resistentes que los micrófonos dinámicos y les influye la humedad del ambiente así como otros factores climáticos; por ese motivo requieren de un cuidado especial al usarlos.
- Patrón polar o direccional: dependiendo del modelo se pueden presentar micrófonos cardioides o multi patrón, que significa que podemos escoger entre distintos patrones dependiendo del uso; por ejemplo cardioide, figura en 8, omnidireccional. Para la grabación de voces lo más conveniente suele ser usar el patrón cardioide.
Este tipo de micrófono necesita de alimentación externa o phantom power, lo que significa que el preamplificador que usemos debe proveerla, de lo contrario no vamos a poder grabar.
Ejemplo de micrófono de condensador de la firma Neumann, modelo U87. Imagen tomada de: https://commons.wikimedia.org/wiki/File:Microphone_U87.jpg
Micrófonos de cinta
Son una variación de los micrófonos dinámicos, funcionan usando una cinta delgada metalizada como membrana, que se mueve dentro un imán, lo que finalmente genera la señal de audio resultante..
- Sensibilidad: tienen valores relativamente bajos similares a los micrófonos dinámicos e incluso menores en algunos ejemplos, por lo que suele ser necesario combinarlos con un preamplificador capaz de amplificar muchos decibeles con bajo nivel de ruido.
- Respuesta en frecuencia: tienden a realzar considerablemente la zona de los bajos/medios bajos, pero también exhiben una caída en las altas frecuencias; esto los hace ideales para grabar voces que sean estridentes o brillantes, ya que las tiende a suavizar y a capturar más cuerpo.
- Respuesta en transiente: es similar a la de los micrófonos dinámicos por lo que se tiende a capturar menos detalles que con los de condensador.
- Robustez: tradicionalmente son micrófonos muy delicados, en especial por lo delgado de la cinta y el hecho que puede romperse al ser golpeada por una masa de aire importante, además suelen ser pesados por el imán que precisan. Algunos modelos actuales mejoran estas problemáticas y son un poco más robustos.
- Patrón polar o direccional: por su funcionamiento tienen un patrón polar de figura en 8, es decir que captan de igual manera al frente y detrás de la cápsula, atenuando mucho el sonido que llega a los costados de la misma. Hay que tenerlo en cuenta al momento de grabar ya que si la sala no tiene tratamiento acústico, el sonido de las reflexiones que va a llegar a la parte de atrás de la cápsula puede colorear significativamente el sonido resultante.
Este tipo de micrófono no necesita de alimentación externa o phantom power y en efecto se pueden dañar si la reciben accidentalmente.
Ejemplo de micrófonos de cinta, a la izquierda el modelo clásico RCA 44 y a la derecha uno moderno de la firma Royer modelo 121. Imagen tomada de: https://zh.wikipedia.org/wiki/File:Rca44.png y http://www.royerlabs.com/R-121.html
Tratamiento acústico de la sala
Otro de los puntos vitales para obtener una grabación clara y pura de la voz, es tener un buen tratamiento acústico en la sala donde se va a grabar.
En particular esto adquiere mucha importancia ya que los micrófonos no solo captan el sonido puro de la voz, si no que también captan las reflexiones del sonido contra las distintas superficies de la sala: paredes, piso, techo.
Esto es algo que sucede todo el tiempo «en el aire» produciendo alteraciones en el timbre de lo que estamos grabando, ya que se suman en el micrófono el sonido puro de la voz con las reflexiones de la sala.
Dichas reflexiones están separadas en el tiempo con el sonido directo y por lo tanto causan interferencias, que son percibidas como alteraciones en el timbre percibido.
El problema es que las alteraciones en el timbre pueden pasar desapercibidas al momento de grabar y luego no se pueden corregir con ecualización u otro proceso.
Por ello es muy importante que el sonido que capte el micrófono sea afectado lo menos posible por estas reflexiones sonoras indeseables, usando tratamiento acústico para minimizar dichos efectos.
En el entorno del home studio podemos simplificar el tratamiento acústico al uso de materiales absorbentes acústicos como lo son: lana de vidrio, lana de roca o espumas absorbentes. Veamos algunas sugerencias al respecto.
- Cantidad de material: en principio vamos a necesitar usar entre un 20 a 30 % de material absorbente cubriendo las superficies de la sala de grabación; esto significa que si tenemos una sala de 100 metros cuadrados necesitamos cubrirla con 20 metros de material absorbente. En la práctica la idea es cubrir la zona donde se va a cantar y particularmente las superficies que están más próximas al micrófono.
- Distribución del material: la idea va a ser distribuir el material en proporciones similares donde se va a cantar, teniendo en cuenta colocar material en el techo, paredes laterales y traseras, ya que el sonido viaja en todas las direcciones. Tener en cuenta que si usamos un micrófono con patrón polar cardioide, es necesario tener material absorbente detrás del cantante que es donde el micrófono es más sensible a las reflexiones.
- Usar alfolmbra debajo del micrófono: se sugiere que debajo del pie del micrófono y del cantante se sitúe una alfombra, cubriendo el área donde se va a pisar, para evitar las reflexiones del piso además del sonido de las pisadas.
- Cubrir el atril de las letras: si vamos a usar un atril para sostener las letras es una buena idea cubrirlo con alguna tela, para minimizar las reflexiones del sonido contra el atril.
Vista del tratamiento acústico de una sala para grabar voces, en beige se observan los paneles absorbentes que dan hacia la parte trasera del micrófono donde el mismo es más sensible a captar reflexiones. Imagen tomada de: https://www.gearslutz.com/board/attachments/studio-building-acoustics/218359d1296949260-reflections-vocal-booth-window-img_0381.jpg
Si se graba en salas con muchas superficies reflectantes se puede usar un escudo anti reflexiones para el micrófono, que es un dispositivo en forma de arco que se ubica rodeando el micrófono en la parte frontal al cantante, que tiene material absorbente y evita las reflexiones de esa parte.
Ejemplo de un escudo anti reflexiones de la firma sE, modelo RF-X.
Distancia cantante/micrófono
La distancia a la que ubicamos al cantante respecto del micrófono determina bastante el tipo de sonido que vamos a obtener y en algunos casos puede ser el factor que modifique drásticamente el resultado.
En particular la distancia a la que vamos a grabar depende un poco del tipo de micrófono que usemos, por las características que tiene cada familia de micrófonos, algunos son más sensibles, otros realzan mucho las bajas frecuencias, etc.
Un detalle a tener en consideración cuando grabamos usando el patrón polar cardioide, es que los micrófonos presentan un realce en las bajas frecuencias llamado efecto de proximidad, que nos puede jugar a favor o en contra.
Esto significa que si grabamos al cantante a una distancia muy próxima al micrófono, vamos a obtener un resultado con muchos bajos y cuerpo; que son un agregado del micrófono y por lo tanto modifican el sonido original.
Si estamos ante un cantante que ya tiene una cantidad suficiente de graves, el efecto de proximidad va a ocasionar un sonido exagerado en esa zona y que tiende a ser incontrolable en la mezcla. Veamos entonces algunos lineamientos para escoger la distancia al micrófono óptima:
- Para los micrófonos dinámicos: se sugiere usar una distancia entre 5-10 cm entre la cápsula y el cantante, mientras mayor sea la distancia el sonido va a ser más natural con menos refuerzo de graves, pero vamos a captar más sonido de las reflexiones. Se debe buscar un punto medio.
- Para los micrófonos de condensador: se sugiere usar una distancia entre 10-15 cm entre la cápsula-cantante para evitar el efecto de proximidad y obtener los resultados más neutrales.
- Para los micrófonos de cinta: se sugiere usar una distancia entre 10-15 cm entre la cápsula-cantante para evitar el efecto de proximidad y obtener los resultados más neutrales, tener en cuenta que estos micrófonos son los que más exageran las bajas frecuencias.
Hay que tener presente que la idea es evitar el exceso de graves del efecto de proximidad, al mismo tiempo de evitar alejar demasiado el micrófono del cantante, para mantener el sonido lo más puro posible.
Ejemplo de la distancia sugerida entre el cantante y un micrófono de condensador, a medio camino se encuentra el filtro anti pop. Imagen tomada de: https://commons.wikimedia.org/wiki/File:Pop_filter.jpg
Uso de filtro anti pop
Si vamos a usar un micrófono de condensador para grabar las voces, hay que tener en cuenta que los mismos son muy sensibles al aire que golpea su membrana.
En general este aire se genera con las llamadas consonantes explosivas como: p, t o k, pero principalmente con la letra «p». En términos prácticos cuando el aire de esa consonante golpea el diafragma se genera un sonido como un «pop» de mucha amplitud, con bajas frecuencias y muy molesto.
Dicho sonido puede pasar un poco desapercibido si no lo conocemos, pero sin duda ensucia mucho la mezcla y es un ruido espurio para la claridad de las voces que vamos a grabar.
Afortunadamente este problema se puede evitar de forma sencilla usando un dispositivo llamado filtro anti pop, que básicamente consiste en una circunferencia con una tela/metal al medio, dicha tela filtra y atenúa el aire que golpea el diafragma.
Los filtros anti pop por lo general son de una tela sintética y se pueden conseguir como accesorio al micrófono; vienen con un brazo extendible móvil, para su colocación sobre el soporte del micrófono en la posición ideal.
Se sugiere ubicar el filtro anti pop a mitad de camino entre el micrófono y el cantante, es decir a unos 7-10 centímetros del micrófono aproximadamente.
Ejemplo de filtro anti pop. Imagen tomada de: https://commons.wikimedia.org/wiki/File:GaugeInc_PopFilter.png
Ajuste de la ganancia del preamplificador
No hay cosa que perjudique más el sonido de una voz grabada que el usar un ajuste de nivel de entrada elevado cercano a la zona roja del secuenciador, es que una vez que grabamos distorsionado no hay forma de ir para atras.
A veces el caso es que logramos ajustar el nivel de tal manera que no distorsione en las estrofas, pero al entrar en una parte «candente» como el estribillo el nivel se dispara y saturamos con seguridad.
La idea en este punto va a ser ajustar el nivel de entrada de tal forma que tengamos bastante resto o headroom y que en ninguna parte de la canción tengamos problemas de distorsión. Veamos algunas sugerencias para este proceso.
- Nivel ideal de grabación: para grabar voces se sugiere que el nivel de entrada sea cercano a -20 dB RMS en promedio la mayor parte del tiempo. Para medir esto vamos a necesitar colocar un medidor de nivel RMS en el master fader de la sesión y solear la pista de la voz al ajustar la ganancia.
- Ajuste de nivel: necesitamos pedirle al cantante que interprete la parte más fuerte de la canción simulando la grabación, con un ajuste de monitoreo realista; en ese punto vamos a ajustar el nivel para cumplir con los -20 dB RMS. De esta forma cuando pase a las partes un poco más débiles nunca habrá distorsión.
- Ir a lo seguro: si vemos que el cantante se emociona y incrementa el nivel al avanzar con la sesión, es momento de reducir el nivel de entrada del micrófono y mantenernos en lo seguro.
Si no tenemos un medidor de nivel RMS a la mano se sugiere mantenernos lejos de la zona de distorsión o clipping, para ello puedes usar la parte verde de los medidores de nivel del canal en tu secuenciador, pudiendo ocasionalmente pasar al amarillo/naranja.
Hay que tener en cuenta que los secuenciadores modernos traen algún plugin de medición de nivel RMS o en su defecto se puede ajustar en las preferencias para que los medidores de los canales estén en RMS o incluso en la escala K.
Mezcla de monitoreo adecuada
Otro punto elemental para obtener una buena grabación de voz, muchas veces relegado como último item, es preparar una buena mezcla de monitoreo para que el cantante se escuche claramente, con comodidad y pueda darnos la mejor interpretación.
Resulta que si el cantante se escucha de menos o con mucho nivel va a variar su afinación general hacia arriba o abajo, de lo mejor que puede afinar.
El objetivo es que al momento de grabar las voces tengamos hecha una pre mezcla de la canción, en la que todos los elementos se entienden, tienen definición, claridad, dejando espacio para colocar las voces encima.
Es necesario hacer que la mezcla para el cantante sea a su medida, de tal forma que se escuche con total comodidad entre los elementos de la mezcla ya establecida. Veamos algunas sugerencias sobre este punto.
- Preparar la sesión: lo mejor que podemos hacer para que la grabación resulte libre de problemas es asegurarnos de tener una pre mezcla adecuada para que el cantante interprete encima; esto signfica hacer un buen trabajo en la frecuencia, la dinámica y los planos para que todo suene cercano a como queremos que suene la canción.
- Para la mezcla del cantante: es una buena idea preguntarle al cantante qué elementos quiere escuchar más fuerte y cuales con menos nivel; tener en cuenta que casi siempre será necesario que la voz resalte en todo momento, para una escucha óptima de su parte.
- Uso de procesamiento para la escucha: es una buena idea aplicar algo del procesamiento que usaríamos al mezclar como filtrado, compresión y ecualización, de tal forma que en la escucha la voz suene pulida y agradable. Al usar plugins como inserción en tiempo real no vamos a estar «grabando» el procesamiento y lo podemos modificar luego, por lo tanto van a ser procesos no destructivos.
- Uso de efectos de tiempo: muchas veces podemos hacer que el cantante este más comodo al usar algo de reverberación o delays para darle una sensación de ambiente y realismo a la interpretación; tener en cuenta de usar el punto justo de efecto para no disminuir la claridad.
- Revisar la mezcla del cantante: una vez hicimos todo el trabajo antes mencionado es tiempo de escuchar como lo está haciendo el cantante, en ese sentido es buena idea tomar sus audífonos y ver que todo esté en orden, tanto en términos de los niveles, planos y efectos. Nos vamos a dar cuenta que a veces el cantante dice que todo está bien pero pueden haber desperfectos grandes en su monitoreo, que solo los notaremos al escuchar personalmente.
Al tomar todas estas precauciones vamos a ver que la diferencia es inmensa, entre lo que puede rendir un cantante incómodo, contra uno que se siente bien; los resultados te lo agradecerán y el tiempo de edición será mucho menor.
Creando el ambiente adecuado
Además de sortear los obstáculos técnicos y de preparación, hay algunas cosas que se pueden hacer para que el cantante entre «en la zona» y sea capaz de entregar interpretaciones conmovedoras.
Resulta tan importante que una toma tenga buena afinación, precisión en el tiempo, como el factor mágico. Esa magia suele ser producto de que el cantante se olvida que está siendo grabado y puede hacer su parte sin stress o preocupación.
Sin dudas que si requerimos de buenas interpretaciones los músicos deben ser mimados y en el caso del cantante debemos extremar las medidas, ya que la voz es lo primero que un oyente le presta atención. Veamos algunas sugerencias al respecto.
- Apagar las luces: el ambiente de grabación juega un papel de intruso para la intimidad musical y a veces con otra gente mirando al cantante se puede perturbar esa intimidad; se pueden apagar o reducir las luces donde se está grabando para favorecer la sensación en la interpretación.
- Tener agua a mano: el mejor aliado de un cantante es una buena hidratación entre tomas, por lo que se sugiere tener agua a temperatura ambiente a mano para ofrecerle al cantante.
- Tener un teclado cerca: a veces el cantante puede perder el eje de la melodía, tener dificultades con una frase o nota en particular; en esas situaciones sirve mucho tener un teclado para referenciar la melodía correcta. Tener en cuenta que lo ideal es conocer la melodía de la canción para poder asistir correctamente.
- Usar palabras adecuadas: cuando algo no está saliendo bien en la grabación resulta muy poco productivo agregar negatividad al momento, en ese sentido es bueno tener palabras positivas a mano para poder llevar al cantante a buen puerto y que todos terminen contentos.
Para satisfacer las necesidades en este punto tenemos que usar la creatividad y cualquier idea que se nos pueda ocurrir es válida, siempre que beneficie la sesión y que hagamos feliz al cantante.
Conclusiones
Las voces son quizás el elemento más importante para el éxito de una producción musical. Grabarlas de una manera óptima es el primer paso para obtener voces profesionales en el resultado final de nuestras producciones.
En el artículo desglosamos el proceso de cómo grabar voces profesionales en las partes que lo componen.
Lo que tenemos que recordar siempre es que el objetivo al grabar una voz debe ser complementar las características del cantante y de la canción con la que trabajemos con las herramientas que tengamos a disposición.
En el contexto del estudio profesional, hay otras variables que se pueden considerar cómo la elección del preamplificador pero como nos concentramos en la realidad del homestudio es poco probable que tengamos acceso a la opción de elegir entre varios preamplificadores profesionales a la horad e trabajar.
Recuerda que el resultado final no depende de una sola parte del proceso y es necesario darle la misma atención a cada item. Desde la preproducción hasta el mastering, todas etapas deben ser cuidadas.
Espero que estos consejos te sean de utilidad y que puedas lograr grabar voces con un sonido profesional lo antes posible.